4. EL MENSAJE DEL TERCER ÁNGEL. ¿Qué fue lo que se rechazó en 1888? (3)
EL MENSAJE DEL TERCER ÁNGEL
¿Qué fue lo que se rechazó en 1888? (3)
El término "la justicia de Cristo" llegó a ser un término familiar después de 1888. Se usaba como abreviatura de "la justicia de Cristo por la fe", o de "justificación por la fe". Esta frase se usaba para hacer referencia tanto a la justicia de Cristo imputada como impartida, o amvas, ya que no pueden ser separadas.
A. T. Jones sabía exactamente en qué consistía la oposición al mensaje de 1888 ya que él participó en anunciar el mensaje. Tambien conocía la posición de Elena de White, ya que ésta última pasó bastante tiempo en compañia de Jones y Waggoner dando el mensaje.
La evidencia que presentamos a continuación apoyara plenamente esta conclusión. Aún varios años después de 1888, todavía continuaban dando institutos ministeriales, y Elena de White pensaba que ya habían estudiado el mensaje de 1888 lo suficiente como para estar dándolo a otros a esta altura. Notemos el comentario que hace:
"Aun cuando la luz ha sido dada una y otra vez, los hombres son llamados de los campos, donde debían haber continuado trabajando con el amor y el temor de Dios... para pasar semanas asistiendo a asambleas ministeriales. Hubo un tiempo cuando esta obra era necesaria, porque nuestro propio pueblo se oponía a la obra de Dios rechazando la luz de la verdad acerca de la justicia de Cristo por la fe. Esto debían ellos haberlo recibido y haberlo hecho resonar con el corazón, la voz y la pluma, porque es su única eficiencia. Debían haber trabajado bajo los dictados del Espíritu Santo para dar la luz a los demás." Testimonios para Ministros, p. 401.
El contexto de esta cita demuestra que está haciendo referencia a la justicia de Cristo impartida, pues dice que era su única eficiencia. Dice que debieran trabajar bajo los dictados del Espíritu Santo. Esta frase, "nuestra única eficiencia", es una expresión que Elena de White usa muchas veces para mostrar que es solo a través del Espíritu Santo que nuestro trabajo llega a ser eficiente. Veamos a continuación tres ejemplos que evidencian ese mismo hecho.
"La obra del Espíritu Santo es inmensurablemente grande. Es de esta fuente de donde vienen el poder y la eficiencia del obrero de Dios... La luz del cielo penetró las mentes entrenebrecidas de aquellos que habían sido engañados por los enemigos de Cristo, y la falsa representación que de Él dieron, fue rechazada; porque a través de la eficiencia del Espíritu Sano ahora lo vieron exaltado como Príncipe y Salvador..." Review and Herald, 29 de noviembre de 1892.
Y hablando sobre la oposición que hemos estado rastreando, Elena de White dijo:
"El enemigo les impidio (al pueblo de 1888) que obtuvieran esa eficiencia que pudiera haber sido suya para llevar la verdad al mundo, tal como los apóstoles la proclamaron después del día de Pentecostés". Mensajes Selectos, Tomo 1, p. 276.
Entonces lo que Elena de White está diciendo en Testimonios para los Ministros, p. 401, es que, aquello a lo cual se opusieron y dejaron de lado en 1888 y en adelante, fue la justicia de Cristo por la fe que el Espíritu imparte.
Esto constituye una confirmación positica de lo que A.T. Jones dijo en la Conferencia General de 1893 que citamos anteriormente. Fue la justicia de Cristo lo que él decía que era el fuerte clamor: la lluvia tardía. También la página 401 de Testimonios para Ministros es una confirmación positiva de la obra de la justificación por la fe en sus dos aspectos. Es este significado abarcante de la justificación por la fe el que se presenta en textos legales como Juan 3. 3-6, 1 Juan 5.1; Zacarías 3.1-5, Tito 3.5-7 y en el libro Discurso Maestr, p. 97 (Edic. 1964).
Low Scarbrought, Árboles de justicia. El mensaje de 1888
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